En mi país Argentina,
ya entramos en este día tan esperado por muchos,
algunos creyendo que será el fin de los tiempos;
otros creyendo que comienza el día del juicio;
pocos convencidos
de que nada sucederá. Ojalá.
Yo descubro que suponer lo que se profetiza y habla,
pudiera cumplirse, ha despertado en no pocos
una nueva idea
que somos un todo, sin fronteras, sin banderas,
sin ideologías que nos separan siempre.
Si todo se va al carajo, todo somos iguales
y ahí solo ahi
nos descubrimos como raza humana,
pues no somos menos que eso.
Y es mucho, es todo, es el propósito.
Si esta noche podemos sentir de una puta vez
que si algo sucediera nos sucede a todos...
valió la pena procuparse
aunque sea por un rato, en creer
que todo acaba!
brujaMar
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